Ya se ha acabado el primer año. Un año que pintaban como la base para nuestro futuro y no ha resultado más que un año en el que hemos aprendido alguna que otra cosa útil (historia, política... pero periodismo más bien poco).
Aún recuerdo los primeros días, con las clases de presentación y todos un poco descolocados. Algunos a su bola, otros que ya daban a entender que las horas que iban a pasar en la facultad serían las mínimas, y la mayoría intentado encontrar a alguien para no sentirse solos. Actuábamos como siempre que se llega a un sitio nuevo, expectantes ante lo que teníamos enfrente, con cierta curiosidad pero también un poco de miedo.
Poco a poco fuimos conociendo a alguna gente y empezando a hacer amistades. En clase empezamos a darnos cuenta de lo que era la universidad, conociendo a varios profesores incompetentes, pero aprendiendo de algunos otros.
Llegaron los primeros exámenes, se superó una época que parecía no acabar nunca y volvieron las clases en el segundo semestre. Otra vez lo mismo, profesores buenos y otros totalmente repelentes, que ahuyentaban a la gente de clase de una manera increíble. Eso sí, al final - como yo soy lento -, he ganado confianza con otros aprendices de periodistas y al menos hemos convertido los descansos entre clases (y alguna que otra campana) en algo divertido.
A nivel de estudios, hemos aprendido de temas como historia y política, con grandes profesores; algunas cosas relacionadas con los medios y los grupos de comunicación etcétera; pero poco o nada sobre como se escribe bien una noticia o un reportaje por poner algunos ejemplos. Es decir, que para lo que realmente estamos ahí y es lo que menos hemos aprendido. Es un poco triste la situación en ese aspecto (y dicen que segundo es peor...). Pero bueno, años de trámite para salir de la facultad con un título bajo el brazo.
De todos modos, ahora ha llegado el final de este primer año y llega momento de hacer balance. Un balance después de unas semanas llenas de exámenes y trabajos, con noches sin prácticamente dormir, horas delante del portátil acabando trabajos una semana después y exámenes aprobados con lo memorizado la noche anterior.
La verdad es que no tengo queja y se me ha pasado muy rápido el curso, lo que es señal de que ha sido bueno. Ahora sólo queda esperar que el que viene sea igual o mejor que éste, y que sea rodeado de la misma gente que este año. Sino, no será lo mismo.
Por eso, de este primer año en la facultad me quedo con alguno de los grandes profesores que hemos tenido y - por supuesto - con esa gente que he conocido.
Si alguno de vosotros lee esto: Disfrutad del verano, nos vemos en octubre!
Trenta-cinc anys
Hace 19 horas
2 comentarios:
me ha gustado eso de que eres lento jajaja, hay que ver eh? porque se entiende el contexto en el que esta escrito que si no...
balance positivo eso me encanta, y el año que viene (a partir de octubre) mejor seguro. Ahora a aprovechar bien tu tiempo que para algo te lo has ganado ;-)
un abrazoooooooo
eiiiiiiiiiii¡¡¡¡ jejeje.. todas aprobados no??? vaya suerte¡¡¡ a mi me queda el john todavia, y como voy creo que se me queda para segundo jejeje.. bueno es que como era de los mejorcitos creo que me dan ganas de repetir ajaja..
la verdad es que un año muy positivo, en ciertos aspectos,,,,, esperemos que el próximo sea mucho mejor... estas invitado desde ya a haccer campana con las lollipops jeje... nos vemos en octubre que vaya bien el verano¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
besos y abrazos Karen ;)
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